Nudos emocionales

Nudos emocionales

Apenas  nos acabamos de levantar y  sabemos que será un día difícil,  nos sentimos mal, estoy hech@ un lío, me siento irritad@, triste, frustrad@, cansad@.

Algunos hechos no resueltos del pasado pueden haberse cristalizado en forma de nudos emocionales que nos llevan a vivir enreded@s en emociones y pensamientos que nos quitan nuestra energía y nuestra capacidad de vivir plenamente. Pueden ser  bloqueos creados por decepciones, heridas, vacíos, pérdidas, ciclos aún no cerrados.

Si hay situaciones, molestias y problemas que persisten en nuestra vida es posible que haya algo que aún debemos resolver. Es una deuda emocional con nosotros mism@s.

Es importante darnos cuenta de esos nudos emocionales que persisten en nuestra vida.  Para un momento y pregúntate ¿les estamos prestando  la atención necesaria? ¿O más bien los consideramos una debilidad que debemos  ahuyentar lo antes posible?

Sin embargo lo que nos puede ayudar es poner más conciencia a lo que nos está pasando, parar y  observar.

 “No se puede deshacer un nudo si no sabemos primero cómo está hecho”.

Aristóteles

Darle nombre, reconocer las emociones que están presentes en nuestr@ día a día nos dará la oportunidad de ser más conscientes de cómo está hecho nuestro nudo emocional.

Un ejercicio que te puede ayudar es el escáner emocional.

Haz una lista con todos aquellos sentimientos y emociones que estés sintiendo, deja que vayan surgiendo de forma espontánea, puedes anotarlos o tomar conciencia de ellos.  Identifica y da nombre a aquello que sientes

Esta es nuestra realidad emocional en este momento, lo que sentimos.

Imagina que desenredas la madeja emocional, como si fuera un ovillo de lana enredado vas a coger uno de los sentimientos y vas a” tirar de él” por ejemplo puedes darte cuenta que te sientes  sorprendid@ porque no esperabas determinada conducta, enfadad@ porque considerabas que merecías un reconocimiento, frustrad@ porque las expectativas no se han cumplido,

Estamos poniendo cierto orden en el caos interior de nuestro mundo emocional, ponemos más consciencia.

Recuerda que nuestros nudos emocionales contienen la posibilidad de realizar aprendizajes importantes. La felicidad no es la ausencia de problemas, es la capacidad de tratar con ellos.